Tuesday, December 6, 2011

Lugar obligado para el cubano de a  pie

De izquierda a derecha, Gerardo Páez, Raúl Otero, Alain de Jesús y Mileisis Vigoa con su niña de cuatro años y como se puede ver con siete meses de embarazo, cuando regresaban de la prisión de Taco Taco en plena autopista.

Artemisa 22 de noviembre de 2011
Por. Rolando Ramírez.

Las prisiones cubanas se han convertido en lugar obligado para los cubanos de a pie como se le dice a los humildes, esos mismos por los cuales se dijo luchar y para los cuales se hizo la revolución.

¿Quién no ha tenido que visitar a un familiar, un amigo o simplemente ha estado preso en las mazmorras de este sistema destructor de vidas y esperanzas?

Recientemente y casi sin poder pero motivada por la dignidad que todavía no le han podido arrebatar al cubano,  una joven opositora se encontró frente a una situación similar cuando embarazada pero sin pensarlo dos veces  cuando se trata de un hermano de lucha, se presento en una de esas prisiones que albergan a tantos delincuentes, asesinos, incluso violadores pero que también admiten en su seno a hombres como Alexander Otero, Cecilio Ruiz  y otros tantos.

Mileisis Vigoa, que cuenta ya con siete meses de embarazo no se detiene ante la infamia y como una mariana se empina frente a las dificultades. Ya casi no puede, lo sabemos, pero quien le  niega el derecho de hacer patria si en ella sola existe más dignidad que en todos sus torturadores juntos.

Así son nuestras mujeres, sino véase a las Damas De Blancos con cuanto coraje han logrado poner en la cuerda floja a los verdugos del pueblo cubano.

En la prisión de Taco Taco al sur oeste de artemisa nos dio una lección de dignidad a todos cuando sabiéndose impresionada por la infamia allí reinante no se debilito, aunque sí admitió estar consternada se sobrepuso y nos invito a ser fuertes a todos, que coraje, pero no hay que impresionarse porque así son nuestras mujeres y Mileisis es una de ellas.

Cuenta Mileisis que sentía revolverse en su vientre al futuro hijo que traerá al mundo pero no sabe si esta desesperación se debía a las injusticias presenciadas en dicha prisión, transmitidas a su futuro bebe a través de sus sentimientos más profundos o si el futuro párvulo ya lleva en sus genes el dolor de su pueblo, pero lo que sí es cierto  es que desde su vientre ya se percibe una nueva estirpe de luchador por la libertad y la democracia.
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