Intolerancia Gubernamental vs. Ingobernabilidad Democrática.

Artemisa, la Habana 13 de octubre de 2009
Por Rolando Ramírez.

En la noche del pasado día 5 de octubre, tuvo lugar en la mayoría de los Comités de Defensa de la Revolución del municipio de Artemisa el debate sobre las palabras del actual gobernante cubano Raúl Castro, en el que según la prensa oficial debería reinar un clima de tolerancia y respeto por las diversas opiniones que de seguro se iban a pronunciar.

Dichas asambleas tendrían que recoger de forma integra todas las inquietudes y sugerencias que los más afectados en estos casos, el pueblo en su totalidad, lanzaría sin el mínimo temor a ser reprimidos, al menos eso era lo que se pensaba, pero la situación fue bien distinta. Comenzada la tan esperada reunión donde quizás por vez primera muchos cubanos tendrían la esperanza de que sus males fuesen tomados en cuenta, un grupo como de costumbre trató de cómo se dice en buen cubano poner el parche antes de que saliera el hueco, e intentó impedir de este modo que brotaran con fuerzas las opiniones reprimidas por más de cinco décadas.

La reunión parecía un monólogo hasta que un joven valiente y renuente a formar parte de la orquestada mentira, Promotor de los Municipios de Oposición y de la Ingobernabilidad Democrática, su nombre Gerardo Páez, se lanzó al combate y expuso de manera clara cuales eran los verdaderos problemas que más afectaban a los cubanos, principalmente a los cubanos de a pie. Esto bastó para que los miembros de las brigadas de respuestas rápidas le impidieran seguir hablando, produciéndose un altercado entre Gerardo y algunos partidarios del sistema, entre ellos el presidente del CDR y uno de los militantes del Partido Comunista de Cuba quienes le prohibieron absolutamente seguir hablando.

´´ y eso que los debates iban a ser totalmente libres de intolerancia ´´, comentó una joven que se encontraba en dicha reunión.

Sobre este incidente Gerardo manifestó sentirse un tanto defraudado, no solo por que al pueblo no se le debe manipular, sino por que junto a el habían otros opositores que le dieron la espalda y esta a su entender no es una actitud digna de quienes dicen ser fieles luchadores por los derechos de todos los seres humanos, palabras estas que se vuelven totalmente incoherentes frente a los hechos.

Este es uno de los obstáculos con que contamos de antemano, comentó Gerardo, cuando se le preguntó, refiriéndose a la actitud cobarde mostrada por esos que se dicen opositores y que en el momento de la verdad, lo dejaron solo.

Gerardo no quiso decir el nombre de estos opositores por razones de ética, ya que el mismo siente vergüenza de que cosas como estas sucedan, pero argumentó que en lo que a él respecta seguirá luchando por cuestiones de principios que son mucho más difíciles de vencer, y concluyó diciendo, ´´ frente a la intolerancia del régimen opondremos la Ingobernabilidad Democrática ´´.